Ayer llegue a tu casa y te encontré algo deprimido aunque no me mirabas ni mirabas mostrabas actitud de escucha, te hable varias horas tomaste notas y respondiste a mi conversación aunque claro sonabas algo distante, tu voz a penas era audible; a pesar de q la distancia de nuestros cuerpos era corta, salí corriendo debía irme... perdón la despedida quedo ahogada entre paso y paso lo último que ví fueron tus ojos que tan solo se movieron para verme salir. Volví por ellos presurosa, pero no volvieron a mirarme, ni a mirar a nadie ni a nada.
Arriere Pensee
y-R
0 comentarios:
Publicar un comentario